domingo, 5 de abril de 2020

Revisión de Un pueblo traicionado por Paul Preston: un estudio magistral del pasado turbulento de España

Desde Primo de Rivera hasta el general Franco ... un relato animado de corrupción, incompetencia política y división social en la España moderna


El general Franco, centro, asiste al segundo aniversario de la muerte de Primo de Rivera, fundador de los falangistas, en Burgos, España, 1938. Fotografía: AP


Libro del dia Helen Graham

Paul Preston es lo más importante de Gran Bretaña historiador de la España contemporánea . A People Betrayed es un estudio magistral de su pasado turbulento, visto a través de la óptica de esos gemelos aparentemente inerradicables: corrupción e incompetencia política. El argumento central de Preston es que estos fenómenos socavaron la posibilidad de cohesión política y social en España cuando el país surgió en el siglo XX como una sociedad de urbanización e industrialización.
Si bien la corrupción y la incompetencia política prevalecieron y son frecuentes en España, apenas son exclusivas de ella. Sin embargo, ha habido una tendencia pronunciada entre los autores británicos a escribir con condescendencia sobre los "problemas" de España. El propio Preston nunca lo ha hecho, y nunca se ha involucrado en la mitología de Gran Bretaña "sin problemas" que lo acompaña. El hecho de que escribió Un pueblo traicionado a la sombra del Brexit , con su patología local de mentiras, corrupción e incompetencia deslumbrante, significa que hay mucho en su análisis agudo de los males de otro país para iluminar nuestro propio malestar actual.

La doble valencia del libro, pasado y presente, es una ventaja útil, aunque no sorprendente. Para la corrupción que Preston investiga en España, especialmente su incrustación tentacular, viene con el territorio de los estados y sociedades modernas. Su complejidad cada vez mayor crea nuevas oportunidades para la deshonestidad y la manipulación, especialmente ahora en la interfaz opaca entre el gobierno y el interés privado y corporativo. Leer a Preston sobre el estado como vaca lechera para los privilegiados en la España del siglo XIX y principios del XX tiene un tono deprimente en la actualidad. (Aunque durante algunas décadas hemos vivido con la paradoja neoliberal de que los derechistas están felices de ordeñar el estado, pero ahora lo hacen mientras lo critican como "costoso", restrictivo y algo malo en general).

Los partidarios del general Franco en el 44 aniversario de la muerte del dictador en noviembre de 1975, en Madrid el año pasado. Fotografía: Pablo Blázquez Domínguez / Getty Images

En España, el estado de la vaca lechera fue desafiado hasta cierto punto en la década de 1930, según relata Preston, por un nuevo proyecto político de nivelación social. Algunos líderes republicanos habían comenzado a pensar en términos de una nación inclusiva y de la política como una forma de servicio público. Estas ideas fueron derrotadas cuando la república perdió la guerra de 1936-39, luchó contra Franco y contra las intervenciones de Hitler y Mussolini.

La guerra fue desencadenada por un golpe militar contra las reformas republicanas, y fue financiada en gran parte por el contrabandista y especulador mallorquín Juan March , entonces uno de los hombres más ricos del mundo. Su imagen de "hacer en España", sin límites, puede ser despojada por la observación de Preston de que no era tanto el epítome del superhombre español, como un barón ladrón más, un epítome de capitalismo tout court . Anteriormente había estado implicado en el asesinato de un rival comercial que también había sido el amante de su esposa. Después de intimidar a los periodistas e investigar a los magistrados, March finalmente archivó el caso, en forma de oligarquía consumada, a través de la combinación inmejorable de dinero y altas conexiones políticas.

La victoria militar de Franco produjo casi cuatro décadas de una dictadura personal (1939-75), que Preston califica con razón como la era más corrupta, violenta y desigual de la historia española moderna. El franquismo, respaldado por los militares y proclamando su misión como "salvar a la nación", terminó sirviendo a los intereses de un sector muy pequeño de la sociedad al tiempo que reforzaba violentamente las jerarquías sociales y políticas y expandía el nepotismo estatal. Alrededor de Franco (que acumuló una gran fortuna personal) giraron generales, falangistas,"Católicos nacionales" y su propia familia, todos enriqueciéndose, los miembros de la familia a través de la especulación notoria de la propiedad. Su hermana Pilar, que se presentaba como una viuda sin dinero por su honestidad, de hecho hizo una fortuna en negocios de propiedad ilegal, todo basado en estafas elaboradas y enredos masivos, y todo dependiente de sus conexiones. El gobierno de Franco solidificó la división histórica de España entre el pueblo y la clase política gobernante, sobre todo porque, al final, su apoyo en los pobres centros rurales fue la fuente en la década de 1960 de inmigrantes para los centros industriales en expansión de España. Todo esto Franco lo logró sobre la base de una victoria militar suscrita por Hitler; El feroz sueño de los nazis de una jerarquía irreversible vivió en el franquismo.


Miembros de un batallón de mujeres republicanas en Madrid durante la guerra civil española. Fotografía: ANL / REX / Shutterstock

En otras partes de Europa occidental, la escala de destrucción humana involucrada en el derrocamiento del Tercer Reich dificultó a los opositores de la socialdemocracia argumentar en contra de que los estados se vuelvan más inclusivos socialmente. Esos oponentes no desaparecieron: en su lugar, centraron sus críticas en el objetivo más fácil del "totalitarismo", mientras que también se posaron para esperar un momento más propicio. Ese momento ahora está totalmente sobre nosotros, y ha tomado la forma de una "austeridad" ideológica y violenta. Además de asegurar el enriquecimiento personal de los "bien ubicados", esta austeridad parece estar imponiendo la restauración de las formas de política, jerarquía social y patrocinio anteriores a 1914. En el Reino Unido nos enfrentamos a algo que recuerda al modelo español anterior, descrito en términos coloridos y sombríos por Preston,

Pero si la corrupción y las formas duraderas de la práctica estatal nepotista y el comportamiento social nunca han convertido a España, o Franco, en "diferentes", entonces algo sobre sus poderosos militares alguna vez lo hizo. En julio de 1936, la larga desconfianza entre el ejército y la sociedad civil llevó a sectores ultraconservadores dentro del cuerpo de oficiales, enojados con los políticos civiles a los que culpaban por el fin del imperio, para "colonizar" la propia España, desencadenando así la guerra civil. Preston señala las muchas formas en que el propio ejército había sido corrupto durante mucho tiempo, antes de que alcanzara nuevos niveles bajo el franquismo. Desde la transición de España a la democracia a fines de los años 70, el ejército se ha transformado. Pero los límites severos sobre cuánto cambio fue posible también significan que la corrupción y el nepotismo permanecen incrustados en el estado y la sociedad española, al igual que gran parte del franquismo.

Un pueblo traicionado corre a lo largo de una manera fascinante, repleta de anécdotas llamativas y a menudo de humor negro

La historia relatada en A People Betrayed es larga, pero avanza de manera fascinante, repleta de anécdotas llamativas y a menudo de humor negro, especialmente para el período franquista y posteriores, que involucran a políticos, banqueros, policías y la familia real. La narrativa de Preston combina su don para ser convincente, resumiendo la claridad y para contar detalles: que el tráfico de monopolios incluido uno para el exterminio de ratas se quedará en la mente de muchos lectores. También lo hará su relato del caso Gürtel en curso y celebrado .Como un ejemplo estratosférico del capitalismo de compinches, Gürtel lo tiene todo: soborno extenso, tráfico en puestos públicos, malversación de fondos, lavado de dinero y evasión fiscal, involucrando a los principales políticos conservadores del partido (del Partido Popular), así como magnates, arregladores, consultores y la ciudad concejales El desmoronamiento de Gürtel también expone niveles de adquisición que bordean lo psicótico

El capítulo más original de Preston es sobre la dictadura militar de Primo de Rivera de la década de 1920 (la era de la estafa de exterminio de ratas). De Rivera tenía gusto por hacer pronunciamientos públicos extravagantes, un tuit de Trump de su época. Franco aprendió mucho de él, especialmente sobre la cleptocracia mezclada con un giro patriótico: ambos dictadores desviaron suscripciones "nacionales" coercitivas a sus arcas personales, y De Rivera incluso financió una nueva casa para sí mismo ordenando que se dedujeran las deducciones de los salarios de la gente. Fue bajo De Rivera también, como este admirable libro deja en claro, que las ideas clave del catolicismo nacional se perfeccionaron, lo que luego sostuvo el estado fascista de Franco. Preston ha escrito un libro admirable: una historia viva y completa de la España moderna, pero también, a un solo paso, un ensayo convincente sobre la corrupción contemporánea.

Un pueblo traicionado es publicado por William Collins.

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