Arturo González.
Este Juego de tronos político que ha supuesto la disputa entre IU y PSOE con motivo del desalojo y realojamiento de la Corrala Utopía deja seriamente afectada la fiabilidad de ambos partidos para el consenso sostenido y sujeto a intereses espurios, así como el crédito de la Presidenta de la Junta por su metisaca jurídico en el Boletín Oficial andaluz, y, lo que es aún más grave, la perspectiva a escala nacional de, llegado el caso como es previsible, capacidad sólida para un acuerdo estable de Gobierno.
Ahora se van a celebrar unas elecciones que deberían interesar a todo el mundo, pero que no interesan a nadie: las elecciones europeas. En ellas los tronos se defienden sin coraza alguna, a pecho descubierto y voto en circunscripción y contabilidad únicas: el que más votos tiene, gana. Sin edulcorantes de leyes tramposas o al menos conformadoras de mayorías artificiales, cada uno por su caminito y sin posibilidad de acuerdos discrepantes. Las viviendas de los escaños europeos se reparten sin mixturas ni listas de espera.
Pero, aun con estas singularidades, servirán de ensayo semigeneral para lo que ocurrirá un año después, donde ya resurgirán las broncas familiares. El ejército de la derecha por un lado y en bloque, y los ejercititos de la izquierda o falsa izquierda por otro en marcha desigual. La derrota es previsible, y si no se produce, la guerra y el juego de tronos continuarán. Sus intereses políticos y personales estarán por encima de los intereses y de las carencias de los habitantes de la Corrala España. Como en Sevilla. Que los que fueron perdieron su silla o trono.
Ha quedado inaugurado el miserabilismo político y la prostitución electoral. El General Rajoy ya ha dicho que si no gana el PP, la recuperación retrocederá (¿qué recuperación, la de ellos, cuando el BBVA acaba de informar que se tardará más de diez años y que es necesaria una nueva reforma laboral, pero no dicen que las elecciones europeas no tienen nada que ver con las nacionales y que los objetivos y las propuestas deben ser diferentes?) Escarmentar con lo que ha ocurrido en Sevilla sería una gran victoria. Lejos de personalismos, chulerías y volubilidades. Lo que han sufrido los españoles durante estos últimos años de resignación y empobrecimiento merece una izquierda sensata y no exterminadora. Templen gaitas, por favor. No sean machos ni exclusivistas ni soberbios. De lo contrario, ni Dios ni la Historia ni los Ciudadanos les absolverán. Y lo que piensen los ciudadanos debería interesarles. Son sus patrones y no sus esclavos. Les pueden dejar sin trono en este juego tenebroso de la política. Se levanta el telón, aparecen los actores con sus distintos ropajes y textos que van recitando, ¿cómo se llama la obra? ¿La Corrala de la Discordia, la Corrala de la Injusticia Social, la Corrala de la Rebelión Pendiente, Juego de tronos políticos? Se admiten nombres.
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Gota REPUBLICANA: Doy por reproducido parcialmente el artículo publicado en enero de 2013:
Es periodística y políticamente obligatorio recordar de modo neutral el índice de importantísimos avances instaurados durante la II República: 1. La promulgación y puesta en vigor de la primera Constitución democrática en España. 2. La asunción del poder de un Gobierno provisional de primer orden. 3. El sensible aumento del número de escuelas y de maestros y, nótese, maestras. 4. Una reforma agraria lógica y no arbitraria ni demagógica. 5. Luchar por la elevación del nivel cultural de los españoles. 6. Separación absoluta entre el Estado y la Iglesia. 7. Ley de divorcio por primera vez en España. 8. La creación del Cuerpo de la Guardia de Asalto (más tarde Policía Armada) con intención no represiva, como era la Guardia Civil, sino defensiva. 9. Reducción del personal del Ejército sin provocar traumas personales. 10. Plan de Obras Públicas, que posteriormente se apropió el franquismo, como por ejemplo el trasvase Tajo-Segura, Plan de pantanos en las Confederaciones Hidrográficas del Duero y Ebro, la carretera de alta ingeniería de Granada a Sierra Nevada. 11. Establecimiento por primera vez en España del Impuesto de Declaración de la Renta. 12. Intentar la vertebración de España a través de la aprobación de Estatutos de Autonomía (el catalán en su totalidad y puesto en práctica, el vasco ya durante la guerra civil, y el gallego, que no dejó de ser un proyecto a realizarse). Todo un alarde y muestrario de justicia y modernización de España, alejándose de monarquías absolutas, golpes militares, y retraso secular. Negar esto es caer en la ruindad.
Desgraciadamente varias causas entorpecieron y bombardearon la buena marcha del nuevo sistema político: 1. Las graves y egoístas disensiones entre los partidos políticos, todos, la CEDA de Gil Robles, las desavenencias entre las varias tendencias del PSOE, el Partido Comunista y su pretensión de establecer la dictadura del proletariado, Anarquistas al completo, y los demás partidos claramente minoritarios como Falange o los Tradicionalistas. 2. La rotunda y decisiva oposición y contraactividad de la Iglesia Católica. 3. El Gran Capital y su implacable presión económica. 4. La incultura absoluta de una mayoría importante de los españoles. 5. El ambiente totalitario que existía en Europa. Naturalmente todo esto llevó a la desestabilización y preparación del golpe militar.
No existe, en mi criterio, un ansia republicana mayoritaria en la sociedad española, y los intentos bienintencionados en tal sentido son más románticos que prácticos y explicativos de las ventajas políticas de un regreso republicano. Las posibilidades de retorno de la República en la actualidad se reparten, en mi opinión, al 50% con la pervivencia de la Monarquía, pero crecerán notablemente con el transcurso del tiempo, no sé si mucho. La Familia Real no está a la altura exigible de las circunstancias; su conducta debe ser nítida y ejemplar, cosa que no está ocurriendo. Hasta en la sucesión de las mujeres al trono el Rey no está poniendo el empeño necesario para impulsarla, y si no cuida su imagen, inevitablemente llegará la República.
Nunca nada es inocente. Siempre todo es espurio e interesado en mayor o menor medida. La II República pecó y la hicieron pecar. Y es que la triste historia de España resulta extraordinariamente difícil de encarrilar. Pero es el único intento de que la vida sea una bella probabilidad.
Desgraciadamente varias causas entorpecieron y bombardearon la buena marcha del nuevo sistema político: 1. Las graves y egoístas disensiones entre los partidos políticos, todos, la CEDA de Gil Robles, las desavenencias entre las varias tendencias del PSOE, el Partido Comunista y su pretensión de establecer la dictadura del proletariado, Anarquistas al completo, y los demás partidos claramente minoritarios como Falange o los Tradicionalistas. 2. La rotunda y decisiva oposición y contraactividad de la Iglesia Católica. 3. El Gran Capital y su implacable presión económica. 4. La incultura absoluta de una mayoría importante de los españoles. 5. El ambiente totalitario que existía en Europa. Naturalmente todo esto llevó a la desestabilización y preparación del golpe militar.
No existe, en mi criterio, un ansia republicana mayoritaria en la sociedad española, y los intentos bienintencionados en tal sentido son más románticos que prácticos y explicativos de las ventajas políticas de un regreso republicano. Las posibilidades de retorno de la República en la actualidad se reparten, en mi opinión, al 50% con la pervivencia de la Monarquía, pero crecerán notablemente con el transcurso del tiempo, no sé si mucho. La Familia Real no está a la altura exigible de las circunstancias; su conducta debe ser nítida y ejemplar, cosa que no está ocurriendo. Hasta en la sucesión de las mujeres al trono el Rey no está poniendo el empeño necesario para impulsarla, y si no cuida su imagen, inevitablemente llegará la República.
Nunca nada es inocente. Siempre todo es espurio e interesado en mayor o menor medida. La II República pecó y la hicieron pecar. Y es que la triste historia de España resulta extraordinariamente difícil de encarrilar. Pero es el único intento de que la vida sea una bella probabilidad.
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