venres, 30 de xaneiro de 2015

Caza a podemos: en el mismo lodo todos 'manoseaos'

Jorge Armesto
www.diagonalperiodico.net

Captura de pantalla de la versión de Los Juegos del Hambre de cada sábado.
Hace apenas diez años el relato antagonista al oficial era cosa de cuatro frikis. Anarcos de casas okupas, colectivos sociales invisibles, algún ecologista jipioso, o esos majaras profetas del Apocalipsis que editaban fanzines conspiranoicos y que resultaron tener razón en todo. Los demás estábamos hablando de viajes low cost y nuevos gadgets. Discutir de política era una excentricidad mal vista.
De pronto algo se empezó a palpar en el aire. Algo difuso. Quizá los primeros en olerlo fueron los libreros o algunas editoriales. Empezaron a aparecer en las estanterías los libros de Carlos Taibo, Pierre Bourdieu, Castoriadis, La Doctrina del Shock, la teoría del decrecimiento de Serge Latouche… Y toda esta amalgama dispersa tenía algo en común: articulaban un relato de lo existente contrapuesto al relato del poder.
Desde el PP acusan a Podemos de tener “mandíbula de cristal”. Efectivamente, nadie tiene su cuajo para salir ante las cámaras y mentir de un modo tan asombroso
Luego llegó el 15M y, de entre todos los efectos que produjo, el más importante fue que, por primera vez, se visibilizó de un modo nítido que había cientos de miles de personas participando de esa construcción de un relato alternativo. El poder, sin embargo, parecía sin argumentos, completamente agotado, incapaz de ofrecer ningún tipo de solución a las crisis que se hacían cada vez más palmarias: crisis de representatividad, crisis del sistema productivo, crisis de participación democrática, crisis del sistema económico. Ante todo esto, el sistema mantenía su mismo argumentario rancio; un discurso ya no caduco, sino completamente incompetente. Lo que Castoriadis define como el “ascenso de la insignificancia” empezó a hacerse evidente para cualquiera mínimamente formado: nos gobierna una recua de inútiles, semianalfabetos, sin formación intelectual de ningún tipo y capaces únicamente de balbucear estereotipos y frases hechas que podría escribir hasta el más tonto de nosotros.
El 15M, en su aparente evanescencia, comunicó a todos los grupos de la disidencia y les hizo comprender que era posible construir un relato distinto al del poder. No solo distinto, sino infinitamente más estructurado, más inteligente, más ético, más razonable y razonado. Ya no eran cuatro frikis. Había cientos de miles, quizá millones, que estaban llegando por caminos diversos a conclusiones similares. Era cuestión de tiempo que una fuerza política recogiese ese “runrún”, en feliz expresión de Nacho Vegas. Pudo ser Equo, pero fue Podemos.
Este nuevo fenómeno que visibilizó el 15M es lo que en Podemos llaman “la grieta”. La grieta es la incapacidad del poder para explicar la realidad, ya no digamos para tratar de transformarla o corregirla, y la aparición de un cada vez más poderoso relato alternativo. Otro mundo sí es posible.
Podemos mostró en sus primeros meses una impresionante habilidad para articular ese discurso. Tanta, que obligó a todas las demás fuerzas políticas a jugar, como le gusta decir a Pablo Iglesias, “en el tablero” que ellos proponían. Y no solo eso. Podemos impuso el marco ideológico. A partir de su emergencia todos los actores del debate político tuvieron que explicarse en los temas e incluso en los términos que marcaba la nueva formación: la desigualdad, la falta de democracia, la regeneración ética, la casta.El PP en su convención de hace unos días hizo recitar a muchos de sus militantes el hilarante mantra: “Soy de la casta de…” en el que trataban de mostrarse como un partido de clases trabajadoras. Es decir, se movían en el marco de Podemos. El triunfo de los que imponen su marco se produce cuando el contrario se ve obligado a usarlo (y está incómodo) aunque sea para tratar de negarlo. Pero esto lo explica mejor Errejón en esta intervención que enlazo.
Si no podemos ilusionar a nadie, desilusionemos a los ilusionados, piensan
Durante meses, todas las demás fuerzas políticas han tenido que intentar construir su discurso de acuerdo a la agenda, los términos y los temas que fijó Podemos. Pero hace poco las cosas han empezado a cambiar. La campaña de descrédito que se inició contra Errejón, de la que fue víctima colateral Tania Sánchez (los ataques contra ella son particularmente mezquinos) y que ahora soporta Monedero es, por supuesto, un intento de ensuciar su honorabilidad y cuestionar su presunta honradez inmaculada. Pero dudo que ese sea el mayor beneficio que se obtiene de ella. Al cabo, los simpatizantes de Podemos pertenecen a un rango de edades y formación cultural que, si no les inmuniza, sí les hace más resistentes a las zafias manipulaciones de la prensa oficial. No hay que olvidar que de los análisis demoscópicos se desprende que son los menores de 45 años, formados con estudios, los que más cansados están del binomio PP-PSOE y más críticos son con el actual estado de cosas. Y, por el contrario, el segmento de mayores de 65 años sin estudios es el único donde el PP es mayoritario. No parece que la campaña de “la beca de Errejón” haya supuesto grandes decepciones a sus futuros votantes. Aunque sí que es más probable que surta algún tipo de efecto en los que aún no lo son. Considero más probable que el poder dé a los primeros por perdidos y trate de “vacunar” a los que aún no han sido infectados.
Sin embargo, hay un efecto más maléfico y menos visible y es que Podemos, por primera vez en seis meses, ha perdido la iniciativa del debate. Ya no es capaz de imponer el marco. En su lugar, se ve obligado cada día a responder a toda esta suma de acusaciones de falta de honorabilidad. Como esos malos entrenadores que, cuando venía un equipo con más técnica, embarraban el campo para igualar las fuerzas, así el PP-PSOE y los medios de comunicación que los sostienen, incapaces de responder al debate ideológico y hartos de recibir somantas dialécticas, han decidido que pelean mejor en el fango, en el lodazal perpetuo en que ellos son maestros del juego.
Hace unos días Pablo Iglesias asistió a una tertulia televisiva. Allí tuvo que dedicar ¡45 minutos! a hablar de Monedero. Lo vimos incómodo. No tuvo uno de sus mejores días. No sabe manejarse ahí. Nada que ver con los representantes de sus dos contrincantes políticos principales, que sacan sus mejores mañas en el fangal de la corrupción y la podredumbre. Desde el PP acusan a Podemos de tener “mandíbula de cristal”. Efectivamente, nadie tiene su cuajo para salir ante las cámaras y mentir de un modo tan asombroso sobre su infinita sucesión de corruptelas. Para exhibir ese cinismo hay que valer. Antes que enfrentarse al discurso alternativo al poder que hoy ejemplifica Podemos, todo el statu quo prefiere inmolarse en un aquelarre de putrefacción general.Todos somos corruptos, todos robamos: vosotros también. Incapaces de reanimar su discurso agónico, la única forma de resistirse al nuevo relato que se les opone es tratar de infectarlo con su misma enfermedad de muerte. Si no podemos ilusionar a nadie, desilusionemos a los ilusionados, piensan. Allá donde van, los periodistas acosan a Podemos cual jauría rabiosa. Nada que ver con las amables charletas que mantienen con el resto de representantes políticos. En el debate televisivo al que aludo había tres periodistas de El Mundo; dos en plantilla y otro recién despedido. ¡Tres del mismo periódico! Me pregunto cómo es posible tal cosa. ¿Por qué no todos? El Mundo contra Pablo. Total, ya puestos, qué más da. Todos preguntando lo mismo, una y otra vez, turno por turno. Si el presentador no lo hubiese impedido podrían haber seguido así horas. Y al día siguiente, más. El País no consideró digna de portada la salida de Bárcenas de la cárcel, pero sí el currículum de Monedero. No digo que no carezca de interés periodístico, pero este desequilibrio informativo es inaceptable.
Entretanto, aquellas cosas que habían por fin venido al debate político: la desigualdad creciente, los privilegios obscenos de una casta política/económica cuyos delitos quedan generalmente impunes, el empobrecimiento ciudadano, la situación de emergencia social de millones de personas, la destrucción de la sanidad, el saqueo generalizado, la pérdida de libertades individuales, la baja calidad de nuestra democracia… todo esto ha enmudecido. El fango lo ocupa todo, la carroña lo llena todo.
El quid no es si Monedero actuó de este modo u otro. Si lo podía haber hecho mejor o peor. Yo tampoco creo que sea un dechado de perfección. Ni él, ni nadie. Estamos viendo, además, que la mayoría de estas acusaciones se desinflan en pocas semanas. Pero a unas les suceden otras y a estas otras, otras sucederán. El quid es que, entre tanto, el “tablero de juego” ya no es el lugar donde se ponían en evidencia las contradicciones y las crisis del sistema. No es el lugar donde los defensores del establishment se revolvían incómodos, incapaces de justificarse, de proponer soluciones, de argumentar. No, ahora, por estos días, el tablero de juego vuelve a ser lo que siempre fue: ese pantano hediondo donde estos animalillos llevan una vida entera chapoteando a placer y donde los no habituados a caminar en la ciénaga se enredan y se hunden.

La idea del amor romántico entre los jóvenes disfraza de cariño la violencia machista

Laura Olías
http://www.eldiario.es/

El juicio contra los menores marroquíes por el "beso de Facebook" aplazado un mes
Los jóvenes no detectan violencia en las conductas de control de la pareja. / Efe
Controlar los horarios de la pareja, decirle qué puede hacer y qué no y restringir las amistades del otro. Todas son prácticas que hacen saltar las alarmas en la lucha contra la violencia de género. Conductas abusivas que pueden degenerar en otras formas de violencia y que un tercio de los jóvenes españoles consideran "aceptables" o "inevitables" en determinadas circunstancias. Un informe sobre la percepción de la violencia de género en la juventud denota que las conductas de control no son identificadas como violencia machista, a la que se oponen la mayoría de los encuestados.
Si la pregunta cuestiona el grado de "tolerancia hacia la violencia de género", los jóvenes de entre 15 y 29 años parecen tener claro que es una conducta "totalmente inaceptable", dadas las repuestas de 2.500 entrevistados por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En el informe 'La percepción de la violencia de género en la adolescencia y la juventud', elaborado para la Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad y presentado este martes, se abre de nuevo una brecha de género en las respuestas: ellas aprecian una mayor incidencia de la violencia machista y la condenan en más casos que ellos.
Sin embargo, las respuestas se equiparan cuando se interroga a los jóvenes sobre su tolerancia a otras prácticas que el informe engloba como "violencia de control". Para el 33% de los chicos y chicas, es "aceptable en ocasiones" o "inevitable" que en una pareja tengan lugar prácticas como controlar los horarios del otro –la experiencia más justificada–, impedirle ver a ciertas personas y decirle qué cosas puede (o no) hacer.
Para las especialistas, los resultados son un reflejo cultural de la sociedad. "Y eso es bueno porque se puede cambiar, son cosas que hemos aprendido", destaca Diana Díaz, subdirectora del Teléfono ANAR de ayuda a niños y adolescentes. El mito del amor romántico, o al menos lo más perjudicial de la idea, está detrás de consentir a la pareja que restrinja las libertades de la persona. "Esa idea de que por amor hay que estar dispuesto a darlo todo, que los celos forman parte de él y que formar una pareja conlleva anular la individualidad de la persona", detalla María José Díaz-Aguado Jalón, catedrática en Psicología de la Educación de la Universidad Complutense de Madrid.
La tradicional media naranja implica que la persona está vacía sin su amado, que juntos forman una unidad. "En este contexto se justifican, por ejemplo, el control del horario porque hay que llegar a ser como una sola persona", continúa la profesora.

Las chicas no identifican el problema

A Diana Díaz no le sorprende la cifra. En el teléfono de la fundación (gratuito y anónimo), la inmensa mayoría de las menores que llaman y sufren violencia de género no son conscientes de ello. "Es curioso. Te llaman por otra cuestión, muchas por un problema sentimental que dicen que les genera mucho sufrimiento pero que no saben que es violencia de género. Cuando el psicólogo que está al otro lado empieza a rascar un poco, se da cuenta de que es un problema de violencia", relata Díaz.
En las incidencias que les llegan, la subdirectora del servicio distingue dos tipos de consultas: las que no identifican la violencia y las que exigen una ayuda inmediata porque la situación se ha agravado mucho, con violencia física de por medio.
La mayoría de las chicas que solicitan ayuda a la Fundación Anar justifican las situaciones de control. "Para él la confianza es que le muestre el móvil. Yo lo entiendo porque tiene mucho miedo a perderme". Una respuesta típica, cuenta Diana Díaz, que esconde relaciones abusivas y peligrosas. María José Díaz-Aguado coincide en que la imagen de la violencia de género que tienen los jóvenes apunta a la más explícita: un 97% de los encuestados por el CIS condenan la violencia física y sexual y un 93%, la verbal.
"No están identificando el control como violencia y es muy importante porque esta empieza en forma de control abusivo. Hay que enseñarles que eso no son muestras de amor, que es el principio de la violencia de género", explica la profesora Díaz-Aguado, que ha dirigido varios estudios sobre este tipo de violencia a edades tempranas.

Toleran más el control que los mayores

El informe advierte también de que la tolerancia a estas conductas se presenta de manera algo más acusada que en otros estudios sobre la población en general. ¿Quiere esto decir que los jóvenes están reproduciendo relaciones más tóxicas? "No lo creo. Esa sería una de las razones, pero también hay otras dos posibles. La primera, por la que más me inclino, apunta a las nuevas tecnologías (los móviles y las redes sociales): han aumentado mucho las posibilidades de control y son los jóvenes los que más las utilizan. La segunda posibilidad es que a estas edades, que están en la fase del enamoramiento, se puede extremar el mito del amor romántico", argumenta Díaz-Aguado.
Diana Díaz alerta de que, además, en edades tempranas "la información les llega a través de la televisión, internet, sus series favoritas y las canciones". En todas ellas, o en la mayoría, se reproducen pautas de control propias del amor romántico. Programas como 'Mujeres y hombres y viceversa' o la saga Crepúsculo reproducen sus peores elementos, critica la profesora de la Complutense.
Imagen del programa Hombres, Mujeres y Viceversa.
Imagen del programa 'Mujeres y hombres y viceversa'.
La educación desempeña un papel fundamental para que los jóvenes sepan consumir estos productos culturales desde un punto de vista crítico y, ahí, según Yolanda Besteiro, presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, "está todo por hacer". La secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, presentó junto al estudio dos campañas contra la violencia de género, una de ellas ('Hay salida') destinada especialmente a las más jóvenes.
Sin embargo, Besteiro advierte de que una campaña aislada puede perder su objetivo: "Además, hay que hacer más campañas complementarias. 'Hay salida' va dirigida a las que ya se consideran víctimas, cuando las estadísticas nos dicen que muchas no se identifican como tales. Por lo que hay que reforzar ahí también la información". La eliminación de la asignatura de Educación para la Ciudadanía por el Gobierno restó, además, un espacio a los contenidos en igualdad que han sido rescatados más tarde en Primaria, aunque de manera difusa.
La mayoría de los encuestados (78%) afirmaron que las campañas ayudan a concienciar a la sociedad, pero más de la mitad (un 53%) no recuerdan ninguna campaña. "Los mensajes sexistas llegan de muchos focos, por lo que la respuesta y la educación también tiene que tener muchas fuentes", recomienda Diana Díaz.

Matar la sanidad pública

No es que no se pueda hacer mejor o que no tengamos dinero. Es una estrategia. Así se hunden los servicios públicos y se alimenta el mito de la superioridad de lo privado

Antón Losada
http://www.eldiario.es/




Los defensores del pueblo, ya saben, esa institución que no sirve para gran cosa y estamos eliminando por la austeridad y por el bien de la democracia, acaban de denunciarlo. Saturar urgencias no supone una excepción, fruto de los atracones navideños y la gripe. Responde a una estrategia. Lo han denunciado con un informe que ha ocupado varios meses de trabajo y muchas horas de visitas y estancia en las urgencias. No se basan en una colección de chascarrillos y anécdotas, como acostumbran a hacer muchos responsables de sanidad para justificar su gestión.
Las urgencias se saturan porque faltan camas en los mismos hospitales donde se cierran plantas enteras porque no hacen falta, o se deriva a la fuerza a los pacientes a la sanidad privada a la que estamos rescatando entre todos con nuestros impuestos, igual que hicimos con los bancos.
Las urgencias se bloquean por razones estadísticas. Porque se utilizan para camuflar las listas de espera o porque mientras estás en urgencias no cuentas. Todo lo que habíamos avanzado en veinte años de luchar contra la opacidad y la manipulación en las listas de espera y las estadísticas sanitarias se ha ido por el desagüe. Las ruedas de prensa de los responsables sanitarios se parecen a aquellas que daban los militares americanos todas las tardes en Vietnam y que la prensa acabó llamando "las juergas de las cinco". Todo es mentira y lo que no es mentira, es aún peor.
Las urgencias se colapsan por la misma razón que los colegios y los institutos carecen de profesores, porque entre los cuatrocientos mil empleados públicos despedidos desde 2011, la mayoría eran personal sanitario y educativo.
No se confundan. No es que no se pueda hacer mejor o que no tengamos dinero. Es una estrategia. Así se hunden los servicios públicos, se alimenta el mito de la superioridad de lo privado y se convence a la gente para irse a las mutuas y aseguradoras.
Se trata de un abordaje en toda regla a cargo de auténticos piratas de lo público. Primero se deterioran los servicios mediante la aplicación de políticas de recorte indiscriminado y ajuste fiscal exprés, y en medio de una estrategia de confusión informativa deliberada se reducen drásticamente la oferta y la calidad de bienes, procesos y personal. Luego se procede a descapitalizar el valor añadido aportado por el carácter público y se debilita la confianza de los ciudadanos volviendo todo lo público opaco y discrecional. Finalmente se privatizan "a la carta" mediante procesos de venta opacos, confusos y donde primero se selecciona al comprador y luego se privatiza a su medida.
Así se mata a la sanidad pública para que sobreviva la privada. Es el crimen perfecto.

xoves, 29 de xaneiro de 2015

Humor














As familias da 'imposición' do galego eran catro

David Lombao
http://praza.gal/

A mediados da pasada década, mentres a burbulla inmobilaria estouraba, en Galicia inchábase unha ben distinta: a lingüística. Tras máis de vinte anos coa Lei de Normalización Lingüística en vigor e co galego en retroceso o Goberno da Xunta, daquela sustentado por PSdeG e BNG, sacaba adiante un decreto para fixar un "mínimo" do 50% das materias escolares en lingua galega. A norma, inicialmente apoiada polo PP, serviulle ao partido que aspiraba a regresar a San Caetano para falar, a través de Alberto Núñez Feijóo, dun "conflito lingüistico sen precedentes". Os populares apoiaron esta teoría sobre grupúsculos tan descoñecidos como reducidos que comezaron a lanzar inéditas e rechamantes proclamas, coa inefable denuncia dunha suposta "imposición" do galego en Galicia na súa cerna. Cando xa transcorreron case oito anos estas teorías e a súa amplificación están notablemente diluídas en Galicia pero teñen soporte legal no Estado, toda vez que a nova lei educativa abre a porta ao pagamento con fondos públicos de ensino privado en castelánNa estrea do novo sistema a súa acollida é practicamente nula en territorio galego.
No inicio do presente curso escolar 2014-2015, o primeiro da Lei Wert, UPyD preguntoulle por escrito ao Goberno central cantas "reclamacións" recibira "por parte de familias de escolarización en centros privados para poder recibir ensino en castelán". Na resposta, datada en outubro e que vén sendo difundida en Galicia nos últimos días por mor dunha información do Faro de Vigo, o Ministerio de Educación comeza explicando que o "procedemento que se preveu é moi garantista" e "require da comprobación de todas as circunstancias" que "dan dereito" á "compensación", así como a apertura "dun prazo para solicitar información á comunidade autónoma aceptada". Así e todo, o departamento ministerial xa estaba en condicións de ofrecer os primeiros datos.
O Ministerio comeza explicando que "no primeiro mes de funcionamento deste sistema" a súa Sede Electrónica tivo 293 "apuntamentos de solicitudes", dos cales "256 teñen o estado de borrador", isto é, as persoas solicitantes completaron algún dato no formulario pero non chegaron a confirmalo. Neste escenario, as solicitudes correctamente confirmadas, é dicir, as que contan con todos os datos e nas que "previsiblemente" a persoa solicitante "imprimiu a solicitude e quedou pendente de presentala nun Rexistro físico", eran unicamente 35 en todo o Estado, das que 4 correspondían a Galicia.
As escasas familias solicitantes optan a unha subvención contemplada pola Lei Wert de ata 7.000 euros para sufragar ensino privado
Así, Galicia é a orixe de apenas o 11% dunhas solicitudes que chegaron maioritariamente da Comunitat Valenciana, 25 do total. As seis restantes chegaron en igual cantidade de Balears e de Catalunya, comunidade na que o ministro Wert pensou especialmente á hora de deseñar a normativa. En Euskadi e Navarra non se rexistrou ningunha solicitude para evitar o ensino en euskera.
No caso de que o Ministerio de Educación considere que os alumnos para os que se cursan estas solicitudes non reciben unha "proporción" de materias "en lingua castelá e en lingua cooficial" que sexa "razoable", activa o financiamento dunha praza escolar nun centro privado que, en última instancia, será financiado con cargo aos orzamentos autonómicos. Para cuantificar a cantidade máxima a pagar o Estado fixa como referencia "o gasto público por alumno púbico en ensino non universitario" en cada autonomía. Os datos máis recentes incluídos na propia resposta parlamentaria, datados no ano 2011, implican que as devanditas catro familias galegas poderían optar a unha subvención duns 7.000 euros anuais.
Ademais de coñecer que a preocupación por fuxir do minguante galego no ensino só chega ás casas de 4 dos máis de 200.000 alumnos e alumnas do ensino público galego a resposta do Ministeiro permite observar, ademais, a evolución dese indicador de gasto público por alumno dende o remate dos que se deron en alcumar como anos de bonanza económica. No ano 2004, di o Goberno de España, en Galicia este indicador estaba en 5.430 euros por estudante. Tres anos despois o investimento xa superaba os 7.200 e en 2009 tocaba teito, con 8.041 euros. En 2011, último dato ofrecido neste rexistro, o recorte aplicado era xa de case un 12%.

Solicitudes confirmadas para ensino en castelán

Las Médulas, el oro de Hispania

http://revistadehistoria.es/
Las Médulas son el entorno paisajístico resultante de la antigua explotación minera de oro romana. Este entorno está situado cerca de la localidad homónima, en la comarca de El Bierzo, provincia de León, y está considerada la mayor mina de oro a cielo abierto de todo el Imperio romano.

Las Médulas, llegada de los romanos

Los romanos llegaron a Las Médulas de la mano de Octavio Augusto entre el 26 y 19 AC. y aunque los indígenas preromanos ya habían explotado el yacimiento, fueron los romanos los que convirtieron la zona en la mayor mina de oro a cielo abierto del Imperio.

Las Médulas


El mismísimo Plinio el Viejo  fue en su juventud administrador de las minas, y gracias a él sabemos que se extraían al año 20 000 libras de oro, lo que, teniendo en cuenta los 250 años de explotación, daría 5 000 000 de libras de oro, es decir, 1 635 000 kg. La fuerza de trabajo también era enorme. Plinio habla de 60 000 obreros manumitidos, en tal lamentable condición de trabajo que el propio Plinio dice:
"es menos temerario buscar perlas y púrpura en el fondo del mar que sacar oro de estas tierras"

Ruina Montium, el origen del paisaje de las Médulas

Gracias a que el entorno proveía de todo lo necesario, los romanos canalizaron el agua de los riachuelos, embalsándola en la parte superior de la explotación. Luego, horadaban la montaña con galerías de gran pendiente, y soltaban el agua a través de ellas. La fuerza del agua deshacía la montaña y arrastraba las tierras auríferas hasta los lavaderos.
Las Médulas, Ruina Montium


Uno de los ingeniosos métodos romanos de captación de agua, partía desde la falda noreste del monte Teleno, nada menos que desde una altitud de 2000 metros. Allí los romanos acumulaban la nieve que más tarde, ya convertida en agua, llegaba al río Cabo, que a su vez alimentaba los siete canales que, bordeando la montaña, llegaban a los estanques de la explotación.
Las Médulas, esquema de extracción
Las Médulas, esquema de extracción
Estos canales, cuya longitud se estima en unos 300 kilómetros, tienen una pendiente de entre el 0.6 y el 1 %. El ancho es de 1.28 metros, excepto en las curvas, de 1.60, y su profundidad es de 90 centímetros. La construcción de estos canales, que en algunos tramos discurren bajo la roca en forma de túnel, fue, con diferencia, la obra más difícil y costosa de la explotación, y se puede decir que el sistema hidráulico de las Médulas, es el más espectacular de los conocidos, por la cantidad de agua utilizada y la longitud y el gran número de ramificaciones de sus canales.
Las Médulas
Las Médulas
Los trabajos de explotación romanos para la extracción del mineral de oro, supusieron una tremenda alteración del medio ambiente de la zona, y dejaron un paisaje de arenas rojizas, que se cubrió con verde vegetación de castaños y robles con el paso del tiempo, hasta el punto que hoy en día tiene la consideración de “Paisaje Cultural”, siendo declarado “Bien de Interés Cultural” en 1996 por su interés arqueológico y “Monumento Natural” en 2002, así como Patrimonio de la Humanidad (UNESCO 1997). 

El "Ruina Montium", era el proceso que los romanos usaban par sacar el oro de las Médulas

luns, 26 de xaneiro de 2015

Así quebrou o primeiro experimento sanitario de Feijóo

David Lombao

http://praza.gal/


Hospital de Verín, nado como fundación nos 90 e rescatado para o Sergas en 2008


"Hai xente que leva vinte anos deteriorando a imaxe da sanidade pública e dicindo que hai recortes, eu tento levar vinte anos protexendo a sanidade pública". A pasada semana as críticas do persoal sanitario arreciaban nos hospitais galegos polo "colapso" e o "caos" que estaban a sufrir a causa da combinación de recortes e gripe. Mentres o asunto chegaba ata a Fiscalía o presidente da Xunta retrucaba deste xeito a unhas protestas que non son "nada novo", senón mostra de que "hai interlocutores que se dedican a diminuír a sanidade pública", que xa "nos anos 90" falaban de "recortes". Profesionais da sanidade e oposición parlamentaria retrucaron as verbas do presidente remitíndose, precisamente, aos anos 90, cando como máximo responsable do Sergas contribuíu a facer xermolar un experimento de xestión sanitaria que rematou en quebra: as fundacións hospitalarias.
Estas fundacións chegaron a ser catro e tiveron o seu emblema na Fundación Hospital de Verín, constituída en setembro de 1993, cando Feijóo era xa xerente do Servizo Galego de Saúde e, polo tanto, número dous do seu mentor político, o daquela conselleiro de Sanidade, José Manuel Romay Beccaría. Tivo unha dotación inicial de 100 millóns de pesetas -uns 600.000 euros- e foi concibida para xestionar cunha metodoloxía "moderna" e "flexible" o recinto verinés, cuxa posta en marcha fora promovida polo antigo Insalud, organismo estatal que llo transferira ao Sergas entre dúbidas sobre a súa rendibilidade. Así, puñan a funcionar un hospital que na práctica era parte da rede pública, pero que sería rexido polos principios do sector privado en materias como a contratación ou o pago de incentivos.
Tras tres anos, aínda con Feijóo no Sergas, a fundación xa padecía unha "grave situación financeira"
Apenas tres anos despois do celebrado nacemento, en 1996, o hospital funcionaba con 80 camas, a metade da súa capacidade, e a súa xestión xa estaba sumida na opacidade, no descontrol e tamén nas perdas económicas e mesmo nas contas falseadas. Así o reflectía un duro informe do Consello de Contas no que, malia advertir de que as contas anuais da fundación non expresaban "imaxe fiel" do que acontecía en Verín, era quen de cuantificar unhas perdas superiores aos 200 millóns de pesetas -arredor de 1,2 millóns de euros- e de advertir, en xeral dunha "grave situación financeira" que a facía padecer unha "total dependencia" do "apoio financeiro adicional" da Xunta.

Feijóo, durante unha comparecencia de Romay na súa etapa no Sergas

Descontrol e irregularidades

O proxecto concibido para liberar a xestión sanitaria dos vicios da administración pública mediante "técnicas de xestión empresarial" estaba funcionando, segundo Contas, como "vía de escape aos controis administrativos" sen que existise ningunha "xustificación documental da necesidade e conveniencia de promover unha fundación para prestar servizos sanitarios". O mecanismo artellado por Romay e Feijóo servía para "trasladar funcións propias da Administración, substraendo fondos públicos e bens de dominio público para poñelos á disposición dunha entidade privada".
Contas detectou "falta de control orzamentario", "irregularidades" nas contratacións e "precariedade" laboral "non admisible"
Onde se vendera "flexibilidade de actuación" había"falta de control orzamentario" e ademais, diagnosticaba o ente fiscalizador, "salientables irregularidades na contratación de persoal e na subcontratación de servizos externos que acaban distorsionando as previsións de gasto". Así, a selección de persoal encomendáraselle a unha empresa privada mediante procesos selectivos sen "os requisitos mínimos para garantir un procedemento obxectivo" e, ademais, producíranse "contratacións de persoal laboral temporal á marxe das convocatorias públicas e de todo procedemento que garanta os principios de igualidade mérito e capacididade". Tampouco se comprobara se as persoas contratadas estaban "incursas en incompatibilidades" e, asemade, "algúns contratos eventuais" de "dous, tres, catro días" provocaban a "existencia de emprego en condicións de precariedade non admisibles para un ente tutelado pola Administración pública".

Paso ao sector público e rescate polo bipartito

Cando o Consello de Contas fixo público este informe, en 1998, advertindo ademais de que o Hospital de Verín non era quen de "atender unha importante demanda asistencial" de pacientes da comarca, nin Feijóo nin Romay estaban xa no Sergas. O tándem político-sanitario comandaba xa o Ministerio de Sanidade do Goberno de Aznar e publicitaban as bondades das fundacións hospitalarias, modelo que tiñan intención de implantar en boa parte do Estado. Así, o ministro Romay puña como exemplo a súa creación de Verín para asegurar no Congreso dos Deputados que coas fundacións "os traballadores están mellor pagados" e os pacientes, "máis satisfeitos", todo con menos custe. "É o resultado de introducir técnicas organizativas modernas, con iso conséguense excelentes efectos".
Cando Contas fixo público o seu duro informe Feijóo e Romay xa publicitaban o modelo das fundacións dende o Ministerio de Sanidade
Feijóo, pola súa banda, percorría diferentes centros sanitarios para, na súa calidade de presidente do Insalud, ofrecer a conversión dos hospitais tradicionais en fundacións. "Está admitido pacificamente por todos os responsables sanitarios" que cumpría "avanzar" na "individualización" da xestión de cada hospital, declaraba Feijóo en verbas recollidas por El País.Tratábase, dicía, de gañar "autonomía" e "eficiencia" grazas á "delegación" en entes privados de nova creación.
Fraga converteu as fundacións en públicas, o bipartito tivo que rescatalas con máis de 10 millóns de euros e decidiu disolvelas
Mentres o actual presidente da Xunta tentaba estender o seu plan, en Galicia comezaba a fracasar. Así, o 5 de outubro do 2000 o Consello da Xunta de Manuel Fraga decidía que tanto a de Verín como as demais fundacións hospitalarias pasasen a ser públicas e en 2003 o Executivo, do que xa formaba parte Feijóo, daba o primeiro paso para integrar o seu persoal no Sergas. En 2006, xa co bipartito, a Xunta tiña que inxectar algo máis de 10 millóns de euros nas fundacións. A que máis fondos precisou, máis de 4 millóns, foi a de Verín.
Tras esta operación "obrigada", segundo o Consello de Contas, para "compensar resultados negativos de varios exercicios, cuestionando así a maior eficiencia defendida na prestación de servizos", o bipartito decidiu poñerlle punto e final ao modelo. Deste xeito, en 2007 o persoal das fundacións foi integrado no Sergas. Finalmente, en 2008 a Xunta disolveu as fracasadas fundacións, que dende ese momento pasaron a ser hospitais plenamente públicos.

Multinacionales fijarán la tecnología que necesitan los hospitales públicos

Sanidade privatiza la gestión de los aparatos con una polémica fórmula, dando voz a las empresas sobre el presupuesto y el plazo

Los críticos temen la llegada de máquinas innecesarias o poco probadas


SONIA VIZOSO Santiago de Compostela
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La conselleira Rocío Mosquera, primera por la derecha, junto a un aparato de radiología en el Meixoeiro de Vigo.
Todas las decisiones sobre los aparatos de imagen y radioterapia con los que los médicos del Servizo Galego de Saúde (Sergas) diagnostican y tratan a los pacientes en los hospitales quedarán a partir de este año en manos de grandes multinacionales del sector. La Consellería de Sanidade privatizará la gestión de esta tecnología con una modalidad de contratación poco frecuente bautizada como “diálogo competitivo”, en la que la Administración redacta las condiciones del encargo atendiendo a las propuestas de las propias compañías que aspiran a quedarse con el negocio. El presupuesto de salida es de 88 millones de euros por ocho años, pero, tal y como recoge la convocatoria, esa apertura de la Xunta a los planteamientos de las cinco firmas aspirantes al contrato permite que tanto el dinero como el plazo de tiempo pueda subir sin que se marque un techo claro.
Gigantes del sector tomarán el control absoluto de una infraestructura que incluye mamografías, resonancias, TAC o gammacámaras. Según los documentos del proceso, el Sergas le ha pedido a General Electrict Healthcare, Philips Ibérica, Siemens, Elekta Medical y Varian Medical Systems Ibérica que le digan cuál es la “solución más ventajosa” —sin aclarar para quién— que permita “cubrir la demanda de pruebas diagnósticas y procedimientos terapéuticos”, especificando los medios, el modelo de gestión y organización de su uso, la formación del personal que lo manejará, el mantenimiento, y la renovación y actualización de los equipos.
Sergas y empresas llevan meses reuniéndose para perfilar las necesidades de tecnología de los hospitales. El Consello de la Xunta acaba de dar luz verde a la fase final del diálogo competitivo, un sistema de contratación introducido en la legislación en 2007 por el Gobierno socialista de Zapatero. Antes del 30 de enero las compañías “invitadas” por la Xunta deberán presentar su oferta definitiva. Entre General Electric, Philips y Siemens se elegirá a un “socio tecnológico” para proveer aparatos de diagnóstico de imagen y medicina nuclear (primer lote) o de pruebas e intervención por imagen en cardiología (segundo lote). Elekta Medical y Varian Medical Systems se disputan el contrato de radioterapia (tercer lote), ya que estas firmas ostentan un duopolio mundial en estos equipos.
Para la oposición y la Plataforma en Defensa da Sanidade Pública dejar el diseño del pedido en manos de los proveedores es un “despropósito”. Luisa Lores, activista por la sanidad pública y radióloga con 30 años de experiencia, alerta del peligro de que la industria instale máquinas con una potencia innecesaria —“va a haber un riesgo para los pacientes, que estarán más radiados y sobrediagnosticados”— o insuficientemente probadas. Y critica que la Administración combine los recortes en unos ámbitos con el despilfarro en otros. “Van a gastar millones de euros, por ejemplo, en máquinas para diagnosticar tempranamente una enfermedad para la que no hay tratamiento como el Alzheimer mientras dejan tirados a los enfermos en las casas sin asistencia alegando que no hay dinero”, opina la coautora del libro La salud como negocio, quien apela a un informe del Consello de Contas que demostró que “cuanto más privatizada está la tecnología sanitaria, más se usa”.
Esta forma de gestionar la alta tecnología que va a implantar la Xunta de Feijóo, una variante de la colaboración público-privada en sanidad que el PP exprimió al máximo en Madrid y Valencia, responde a una demanda del sector, asustado en los últimos años por el desplome en un 50% de las compras que le hace la Administración. Baleares, Murcia y Cataluña estrenaron en 2010 la fórmula a la que se apunta ahora Galicia.
Desde la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) aplauden que la Xunta inyecte tanto dinero en renovar las máquinas del Sergas y privatizar su gestión y piden que la inversión se extienda a todos los tipos de aparatos. Lo que cuestiona esta asociación empresarial es que se haya elegido una fórmula de contratación que deja fuera a las pymes. Son “lotes demasiado grandes” y el diálogo competitivo restringe la concurrencia a las multinacionales, explica Carlos Sisternas. El directivo de Fenin considera que este tipo de licitación conlleva riesgos, ya que se exige que las multinacionales invitadas no intercambien ningún tipo de información de sus propuestas a la Administración, una confidencialidad de complicado cumplimiento: “Si hay confidencialidad y una empresa no le cuenta nada a la otra, perfecto. Pero por la proximidad de los actores, esta fórmula es proclive a una aplicación inadecuada”.
Sanidade ha declinado el ofrecimiento de este periódico para explicar esta adjudicación. El entonces director de Recursos Económicos del Sergas Pablo Torres, que dejó el cargo este verano, sí disertó en marzo sobre el proceso en un foro del Club Gertech —una asociación de “altos directivos sanitarios y tecnólogos de empresas e instituciones”— que se celebró en la Esade Business School de Madrid. Ante la pregunta de un asistente sobre quién fija en el diálogo competitivo la estimación de demanda que se va atender con la compra de tecnología a tan largo plazo, Torres desveló que ese ha sido uno de los puntos calientes de las reuniones del Sergas con las empresas, unos encuentros en los que, según su exposición, representantes de diferentes áreas de la sanidad pública defienden por separado sus planteamientos en presencia de la industria. Así lo explicaba Torres: “El jefe de servicio puede decir 'yo creo que hacen falta 17 resonancias'. Y el de la industria dirá 19 o 20. Pero a lo mejor el servicio central de la parte asistencial dice [al jefe de servicio]: 'tú tienes una frecuentación que multiplica por dos la de los demás hospitales; acomoda la demanda y no pongas máquina para satisfacerla'. Hay negociación. Es el trámite bueno para poder cambiar el modelo”.