luns, 10 de novembro de 2014

Fuera de la legalidad pero dentro de la realidad

Suso de Toro
http://www.eldiario.es/

El Gobierno se ha desautorizado a sí mismo, ha prohibido algo y no ha obligado a su cumplimiento

España ha hecho el ridículo a ojos del mundo y el Gobierno a ojos de la ciudadanía

Arranca en Cataluña la jornada de participación del 9N
Lo que ocurrió el domingo, día 9 de noviembre de 2014, es la cristalización de Catalunya como una nación. Sin estado aún, pero la nación que la mayoría creía ser acaban de levantarla voluntario a voluntaria y ciudadano a ciudadana. A través de los medios de comunicación que nos lo han permitido pudimos comprobar que son capaces de actuar como un estado independiente, un estado al margen del estado español y además, por cierto, desafiándolo.
Lo que queda por delante es una nueva situación, ya no se trata de negociar un estatuto que les reconozca carácter nacional e instrumentos para progresar, eso era antes y ya queda muy atrás, sino de una negociación de tú a tú entre un estado y algo muy parecido a un estado. De un lado el estado español con todos sus poderes e instrumentos y del otro una ciudadanía muy organizada y militante que prácticamente arrastra o lleva en el aire a sus gobernantes.
Hoy por la mañana un amigo me llamó desde Vic contándome entusiasmado el ambiente, la normalidad con que transcurría la votación. También yo quería ver aquello, así que busqué en el televisor la televisión catalana, la TV3, pero no la encontré. Esa mera imposibilidad de poder ver la televisión catalana en otro lugar del estado debería servir para comprender los grandes errores de la democracia española. Pero encontré La Sexta, que ofrecía una programación especial, y me quedé, pude ver esas imágenes de personas haciendo fila para poder votar.
Una imagen que me parece ejemplar, ciudadanos haciendo cola ante los puntos de votación, pero una imagen que es terrorífica para muchos políticos españoles. Aquellas personas guardando fila voluntariamente para votar eran terribles enemigos políticos. A quien realmente temen esos dirigentes políticos y sociales no es a Mas o a Junqueras sino a esa gente que madrugó para votar temprano "por si venía la policía a cerrar el colegio". "El problema catalán" es la ciudadanía catalana, no unos dirigentes políticos a los que se puede denigrar o con los que se puede llegar a algún acuerdo sin más, esa gente está ahí vigilante y salen a la calle o acuden a votar una vez y otra. Son peligrosos ciudadanos.
Esas imágenes en el televisor de votación dominical eran las de cualquier cita electoral, con la diferencia de que aparecían personas muy conscientes de que desafiaban al Gobierno y al Estado mismo con sus recursos. Esas personas de aspecto común y pacífico sabían que podían estar cometiendo delito, de hecho habían sido advertidas por la vicepresidenta del Gobierno, quien al tiempo que las avisaba las eximía de responsabilidad pues afirmó que estaban siendo presionadas por el presidente de la Generalitat.
Las imágenes que se pudieron ver no eran las de personas que abriesen los colegios electorales o aguardasen su turno para votar porque se sentían presionadas, la vicepresidenta o ignoraba aquello de lo que hablaba o mentía. Si no acudían coaccionadas y sabían que podían estar cometiendo delito sin duda eran gente muy convencida, cualquier país envidiaría una ciudadanía así. Esa determinación nace de una fuerza contraria muy poderosa: toda la política seguida por el PP y el Estado en relación con Catalunya desde el fallo del Tribunal Constitucional hace cuatro años hasta la última descalificación o amenaza hoy.
En teoría acudieron a votar acerca de la forma en que quieren que exista su país pero sabían que ese día lo que realmente estaban haciendo era defender su derecho a la libertad de expresión. Y lo hacían, es cierto contra el Gobierno que pensó que podía impedírselo pero no lo consiguió.
El Gobierno se movió en la ambivalencia, todo los pasos que dio Rajoy lo conducían a prohibir la celebración de esa votación y los partidarios de su política le exigían que utilizase la fuerza para ello, pero alguien en su entorno finalmente comprendió que en estos tiempos en que hay tantos medios de comunicación y existe Internet no podrían ocultar la imagen de unos guardias armados llevándose urnas y cargando contra votantes. A pesar de que hasta ese momento actuaron para que eso pudiese ocurrir, al final se detuvieron.
Un periódico madrileño tituló ayer "Rajoy está dispuesto a tolerar el 9-N como libertad de expresión", es triste que nos digan a estas alturas que nos toleran la libertad de expresión. Así están las cosas. Pero no le sienta bien al presidente del Gobierno la tolerancia tampoco y ayer apareció en un mitin congestionado y gritando, pretendía salir de una situación muy difícil: quienes lo pusieron ahí ahora calibran que es un gran estorbo. Entre la espada y la pared solo puede tener reacciones desesperadas y contradictorias, cuando gritó que a Mas le faltaba "cordura" continuaba con el lenguaje que ha llevado las cosas hasta aquí, pero a continuación no tuvo más remedio que prometer que al día siguiente de la votación dialogaría. En un mismo día la vicepresidenta asustaba y amenazaba a los participantes en el proceso electoral pero el presidente, por su parte, reconocía que se produciría la votación y que luego dialogaría.
Sin embargo, no cesaron las maniobras para impedir que se diese esa imagen de personas guardando fila para votar y el Fiscal General del Estado, naturalmente designado por el Gobierno, ordena a los "mossos" que identifiquen a los responsables del uso de locales públicos para la votación. Eso ha quedado resuelto cuando el presidente de la Generalitat reconoció públicamente que el responsable era él. El Gobierno se ha desautorizado a sí mismo, ha prohibido algo y no ha obligado a su cumplimiento, España ha hecho el ridículo a ojos del mundo y el Gobierno a ojos de la ciudadanía. Efectivamente se han cometido faltas y probables delitos, la prohibición anterior condujo a que esa demostración de militancia cívica esté al margen de la ley, si Mas es el responsable debe de ser procesado.
A esa situación tan absurda, a procesar al interlocutor con quien se tiene que dialogar y negociar, ha conducido la brillante estrategia del PP de Rajoy y Arriola, han enfrentado a España y Catalunya de un modo que no tiene vuelta atrás. Utilizar el españolismo de estado como arma enfrentándolo al catalanismo ha conducido a esto.
Y en la Corte nadie dirá públicamente y con sinceridad, “nos hemos equivocado profundamente”. Y nadie pedirá disculpas a los catalanes por el modo tan irresponsable y frívolo con que han sido tratadas sus reclamaciones. Nadie.

mércores, 5 de novembro de 2014

Ébola

Las pruebas sobran: todos saben quién es Teresa Romero. Intenten, ahora, recordar el nombre de un infectado africano. De uno solo


LEILA GUERRIERO

La semana pasada tomé un taxi y el conductor me dijo que se sentía enfermo: fiebre, tos. Le pregunté si no le convenía quedarse en su casa y respondió: “Para estar enfermo hay que tener plata”. Cuando se anunció que una española era la primera persona infectada de ébola fuera de África, recordé que el 1 de agosto los diarios habían publicado esta noticia, que guardé: “El creciente temor a que el brote de ébola en África, que ya dejó 729 muertos, se propague a otros continentes llevó ayer a la Organización Mundial de la Salud a lanzar de urgencia un plan de 100 millones de dólares para combatir el virus”. Otra vez: “El creciente temor de que se propague a otros continentes”. A ver si nos entendemos: no fueron los 729 muertos que, hasta ese momento y en Guinea, Liberia y Sierra Leona había producido el virus; ni los 1.323 casos que se habían registrado desde 2013 (ahora son más de 4.800 muertos, más de 10.000 casos). Fue “el creciente temor de que se propague a otros continentes”. Me gustaría saber en qué pensó el Señor OMS cuando pensó “otros continentes”. Me gustaría saber si 729 muertos en Guinea, Liberia y Sierra Leona son más soportables que 729 muertos en —ejemplo— Alemania, España, Estados Unidos. Porque si los 729 hubieran estado muriendo desde hace meses en —ejemplo— esos países, quizás el Señor OMS se hubiera apurado un poquito. En verdad, los africanos deberían estar agradecidos de que el virus sea tan letal y contagioso: si el ébola no estuviera mordiendo ahora las gargantas más poderosas de Occidente, ellos seguirían muriendo —como siguen, de tantas otras cosas— solos, olvidados, hemorrágicos. Las pruebas sobran: todos saben quién es Teresa Romero. Intenten, ahora, recordar el nombre de un infectado africano. De uno solo.

luns, 3 de novembro de 2014

TTIP, El golpe de Estado que se está preparando en silencio

El Tratado trasatlántico de Comercio e Inversión (TTIP) es un tratado de libre comercio entre Estados unidos y Europa que se está negociando en secreto, de espaldas a la ciudadanía, con el que, entre otras cosas, se pretende:
1. entregar los servicios públicos a la empresa privada.
2. acabar con la regulación de los mercados financieros
3. la libre circulación de los datos de la ciudadanía.
Muchas ONG, sindicatos y partidos alertan de que tendría unas consecuencias fatales sobre los derechos sociales y sobre el bienestar y calidad de vida de las clases populares de los países de la Unión Europea.

Verónica Gómez, Attac Alicante.
Enfoque – El timo del TTIP entre EEUU-UE
http://www.hispantv.com

La Unión Europea y EE.UU. negocian, desde junio del 2013, un Acuerdo Trasatlántico de Comercio e Inversión (TTIP). Los principales partidos europeos, conservadores y socialistas, intentan vender este Tratado de Libre Comercio (TLC) destacando los supuestos beneficios económicos que generará y eluden cualquier mención a los riesgos que conllevará el mismo. Pero este acuerdo es una auténtica amenaza para la población orquestado a puerta cerrada para favorecer los intereses de Washington.
En efecto, los 28 Gobiernos de la UE firmaron un mandato que le permite a la Comisión Europea negociar en secreto con el Departamento de Comercio estadounidense. Esta falta de transparencia arroja sospechas sobre cada sector de actividad objeto de negociación, sobre los riesgos fitosanitarios o sobre las normas sociales europeas.
El Observatorio Europeo de las Corporaciones considera que la Comisión está dejando “a los ciudadanos en la oscuridad informativa” y le está “concediendo a gobiernos y empresas extranjeras una mayor oportunidad de influir en la opinión pública, tanto en la UE como en Estados Unidos”, dejando a las multinacionales por fuera del control político.
En este Enfoque se desmontan los supuestos beneficios de este TTIP y el timo que se gesta en los despachos a sabiendas de que los efectos serán catastróficos para los ciudadanos europeos.
Invitados:
José A. García Rubio, Secretario Federal de Economía y Empleo de Izquierda Unida.
Javier Martínez, Observatorio Justicia Fiscal Global ATTAC España.

ATTAC España 

domingo, 2 de novembro de 2014

Ni el PP ni el PSOE van a parar a Podemos

Carlos Elordi
http://www.eldiario.es/

El PP defiende que Rajoy aprovechara el control del Senado para pedir perdón
Rajoy aparece más solo e inepto que nunca.
Se diría que la actual estructura del poder político se está derrumbando a un ritmo que se acelera cada día. Empieza a ser inimaginable que quienes hoy mandan vayan a seguir haciéndolo dentro de un año o quién sabe si menos. Hasta desde dentro del PP surgen voces que piden que no sea Rajoy quien encabece la lista de las generales, al tiempo que en el PSOE se consolidan las dudas sobre la solvencia de Pedro Sánchez como candidato. Las encuestas pronostican un cataclismo electoral que, más allá del anunciado éxito de Podemos, podría dar paso a una situación de ingobernabilidad, transitoria o duradera.
El panorama, al que nada apuntaba hace solo seis meses y que se agrava con la crisis catalana, parece, hoy por hoy irreversible. Y por muchas vueltas que se le dé, no se atisba elemento alguno que pudiera modificarlo sustancialmente. Porque sus raíces son muy hondas. Y las triquiñuelas politiqueras o las argucias electoralistas, que ya es lo único que cabe esperar de los grandes partidos, no van a valer frente a eso.
Podemos está en el centro de todos los debates, sobre todo de los que mantienen por su cuenta y riesgo los ciudadanos corrientes. La aparición el partido de Pablo Iglesias en la escena política ha sido el revulsivo que se esperaba desde hacía muchos años y que muchos consideraban ya imposible. En España la gente se interesa hoy por la política como no lo hacía desde los tiempos de la transición. Y seguramente más que entonces. Porque en aquellos años la gran masa de la juventud se mantuvo bastante al margen del proceso, pues estaba sobre todo centrada en ocupar los enormes espacios de libertad que se abrían, casi por sí solos, tras la caída del franquismo. Y hoy, al menos buena parte de ella, protagoniza la corriente de rechazo a la actuación del poder constituido, e incluso a su legitimidad, que expresan las encuestas.
Ese rechazo es el elemento que define la situación que estamos viviendo. Bastante más que Podemos mismo, que, hoy por hoy, es sólo el vehículo que puede canalizar y dar forma político-electoral a esa corriente. Lo cual no es poco. Y que puede ser mucho si las circunstancias y las decisiones de sus dirigentes lo favorecen.
Hay otra manera de leer los pronósticos para las elecciones generales que hacen los sondeos. Consiste en subrayar que el voto de rechazo, es decir, el voto a Podemos, crece sin parar. Desde el 7% de las europeas hasta el 23 y el 24% de las últimas encuestas. En sólo cinco meses y sin indicios que apuntaran a nada parecido. O, cuando menos, sin que los detectara nadie de los que están llamados a estudiar esas cosas. Pero frente a ese hecho extraordinario hay que colocar otra realidad que sí aparecía claramente en las encuestas, aunque casi ningún analista supo entonces vislumbrar sus consecuencias.
Hablamos de la opinión de la mayoría de los ciudadanos en torno a lo que ha estado ocurriendo hasta ahora y desde hace ya bastante tiempo. De su indignación por la corrupción, por los desmanes de los bancos, de su desconfianza abrumadoramente mayoritaria en los políticos, de su convicción de que éstos eran incapaces de mejorar la situación económica. Que para la mayoría de los españoles era y es mucho peor de lo que dice la propaganda triunfalista del gobierno, que ha sido un fracaso, hasta rozar el ridículo, del gobierno de Rajoy.
Los políticos instalados, sobre todo los grandes partidos, han venido despreciando sin más esos mensajes. Debían creer que, como habían hecho otras veces en el pasado, terminarían por amansarlos. O se veían incapaces de hacer algo para atenderlos. O estaban en otras cosas. Lo cierto es que el rechazo masivo estaba ahí, esperando su oportunidad. La entrada en escena de Podemos se la ha dado. Con un banderín de enganche tan simple como el de presentarse como algo que nada tiene que ver con los que mandan, sea cual sea su color. Y con pruebas fehacientes, al alcance de cualquiera, de su pureza.
Ha sido una especie de milagro, de conjunción perfecta que se da muy pocas veces. Y por eso genera tanto entusiasmo entre quienes se han subido a ese carro. Sin poner mayores pegas. Simplemente porque necesitaban que hubiera una opción distinta, porque las que había ya no les interesaban o les repateaban. En muchos casos, incluso sin que les importe demasiado saber en qué va a terminar todo esto. Porque les basta con poder dar un golpe en los morros a los que ellos creen que les han toreado desde hace demasiado tiempo.
Hoy por hoy no se vislumbra nada que pueda que pueda frenar o revertir esa dinámica. Rajoy aparece más solo e inepto que nunca. Su intento de galvanizar al electorado que se le ha ido con una nueva campaña contra Cataluña, las triquiñuelas fiscales que está ensayando Montoro, o el paquete de medidas electoralistas que a toda prisa prepara su gobierno pueden terminar tan patéticamente como su campaña sobre la recuperación económica. En teoría, aún le queda una baza: la de decir, más o menos como hizo Felipe González en vísperas del referendo sobre la OTAN, que una izquierda dividida va a ser incapaz de gobernar y que frente a eso sigue siendo mejor mantener al PP en el poder. Pero Rajoy está demasiado deteriorado como para poder sacar partido de algo como eso. Y si su partido decide que él sea el cabeza de lista en las generales, el nuevo candidato no lo tendría mejor.
Por otra parte, tampoco es previsible que el PSOE pueda salir del marasmo en el que sigue. Pedro Sánchez aún no se ha quemado del todo, pero sus límites, los personales y los que se derivan de la anterior trayectoria de su partido, de su imagen ante la gente, ya han aparecido con una claridad meridiana. Y las dudas que sobre él ha sugerido su mentora, Susana Díaz, indican que dentro de su propio partido son muchos los que lo ven así. Y no parece que Izquierda Unida y UPyD vayan a modificar la escena que se está gestando. Puede incluso que intensifiquen sus rasgos con mayores trasvases de votos a Podemos.
Aún queda mucho tiempo para las generales. El partido de Pablo Iglesias puede aún meter la pata en ese periodo. O no. O ser víctima de maniobras oscuras orquestadas por el poder. Pero empieza también a estar claro que de aquí a entonces el PP va a sufrir algo parecido una crisis interna. La economía no va a regalar nada bueno al PP. Al tiempo seguirán apareciendo casos de corrupción. Y la crisis catalana va a seguir confirmando la ineptitud del gobierno y la inanidad del PSOE. Y no parece que Pedro Sánchez pueda sacarse ninguna carta de la manga.
La suerte parece echada. Podemos está llamado a ser una referencia en el futuro Parlamento. De la que nadie va a poder prescindir. ¿Para qué? Hoy por hoy eso es una incógnita. Pero que no es imprescindible resolver en estos momentos. Ni, tal vez, posible. Porque lo que hoy está haciendo Podemos es tratar de canalizar una corriente popular que seguramente ni el más optimista de sus gestores preveía tan grande. Y con eso bastante tiene. Todo es muy prematuro. La novedad está dando sus primeros pasos. Y quienes la critican por sus indefiniciones y sus inconsistencias, mejor harían en atender a sus propios problemas. Porque aunque no haya salido a la calle, la corriente a la que se subido el partido de Pablo Iglesias parece demasiado fuerte como pararse por esos detalles. Al menos hasta hoy.

sábado, 1 de novembro de 2014

Los falsos mitos sobre los inmigrantes

Los inmigrantes aportan 23.402 millones de euros, contribuyen al consumo y la recaudación del IVA y ya se han consolidado como una pieza clave en el crecimiento económico.
nuevatribuna.es


En España ya existen 5.252.473 extranjeros según el Censo de Población y Viviendas del INE. El 44,81% se reparten en tan solo 3 provincias (Alicante, Madrid y Barcelona). Su perfil es el de una persona joven menor de 55 años, 6,7 de cada 10 cuenta con un empleo y su integración es creciente en el sistema universitario español. En Andalucía ya son (555.831), Aragón (110.010), Asturias, (48.058), Baleares, (180.360), Canarias, (276.827), Cantabria, (30.057), Castilla y León, (121.767), Castilla y La Mancha (135.761) , Catalunya (923.156), Valencia (691.332), Extremadura, (27.870), Galicia (152.422), Madrid (882.293), Murcia, (184.463), Navarra (51.107), País Vasco (100.701), La Rioja, (34.795).
Durante décadas han proliferado todo tipo de tópicos y clichés sobre la inmigración, uno de los más extendidos es la creencia de que los inmigrantes colapsan el sistema sanitario. Un estudio de La Caixa indica que  los extranjeros acuden un 7% veces menos al médico de cabecera y un 16,5% menos a los médicos especialistas. El perfil joven de este colectivo les inclina a recibir pocas pensiones y a consumir menos recursos sanitarios debido a su mejor salud que los targets de edad más avanzada. Los inmigrantes aportan 23.402 millones de euros y reciben 18.618 lo cual significa que contribuyen al 39% de crecimiento del PIB. Muchos de ellos trabajan en España sin que el estado tenga que pagar nada por su salud.
Los inmigrantes tampoco nos quitan el trabajo, la crisis les ha afectado a ellos con mayor intensidad, un 32,7% de la población inmigrante ha sufrido el desempleo en comparación con el 26% de los españoles. Más del 67% de los inmigrantes trabaja contribuyendo con el pago de impuestos al sostenimiento del país. Los inmigrantes de segunda generación (hijos de inmigrantes que ya han nacido en España o venidos antes de los 12 años de edad) tampoco son una excepción,según un estudio del Instituto Universitario Ortega el 50% de ellos ya se siente español y solo un 10% de los hijos de inmigrantes declara haberse sentido discriminado.
Tampoco es cierto que vivan de subvenciones, solo un 10% de ellos recibió una renta de inserción durante el último año. Otro rumor extendido afirma que los inmigrantes son en gran parte delincuentes, lo cierto es que de cada 100 delitos perpetrados en España 74 son cometidos por españoles y 26 por extranjeros afirma el periodista Francisco Canals. Los tópicos sobre la supuesta “invasión” de este colectivo tampoco tienen base; durante el último año España ha registrado un saldo migratorio negativo de -256.849 inmigrantes ya que la crisis ha empujado a parte de ellos a regresar a su país de origen según revela el Informe de Estadística de Migraciones del INE. La inmigración que llega a España no tiene un perfil extremadamente pobre, según el INE el 75% de este colectivo estaba trabajando cuando decidieron venir a nuestro país. Delincuentes y desempleados son, precisamente, los que no podrían pagarse el billete de avión al no contar con un mínimo de recursos.

"La mayor parte de estos prejuicios se basan en la falta de conocimiento sobre la realidad social y en el excesivo etnocentrismo que sufrimos en Europa" afirma el periodista Francisco Canals. "La cultura del gatillo fácil y la desconfianza ponen el resto y nos inclinan a prejuzgar a este colectivo sin descubrir todo el valor que aportan".

La trama de los cursos falsos de empleo alcanza a Feijóo

Sonia Vizoso
http://elpais.com/

Un amigo del presidente gallego mediaba entre la trama y la cúpula del PP

Los empresarios imputados en la presunta trama de fraude de subvenciones destapada por la Operación Zeta tenían claras sus vinculaciones políticas y dejaban constancia de ellas por escrito, según se desprende de la investigación judicial. La Federación de Autónomos de Galicia “nació desde el Partido Popular”, le recordaba en una carta de mayo de 2010 —incluida en el sumario del caso— al presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, el número dos de esta organización, Francisco Javier Pérez Bello, acusado de pertenecer al entramado que supuestamente desvió para su uso y disfrute buena parte de los 20 millones de euros que recibieron de la Administración —15 de la Xunta y cinco del Gobierno central— para impartir cursos a autónomos que en la mayoría de los casos ni se celebraron.
 Tras dos años de pesquisas, pinchazos y registros, la policía está convencida de que el “intermediario” entre los imputados y los dirigentes populares de más alto nivel era Francisco Ramón Pachi de Lucas Blanco, un empresario madrileño afincado en Bueu (Pontevedra) que, según numerosos testimonios recabados por este periódico, acumula años de amistad con Feijóo.
La Unidad de Delitos Económicos y Financieros de la policía sostiene que Pachi Lucas, que fue visto junto a Feijóo en momentos especiales de su carrera política como su toma de posesión como presidente de la Xunta en 2009, estaba a sueldo de la trama, ya que se “le abonaba un dinero por la práctica de gestiones de interés”, como entrevistas o la “adjudicación y/o cobro de proyectos”, concluye un informe policial. Una empleada del departamento financiero de Azetanet, una de las empresas de Gerardo Crespo —activo militante del PP al que la policía considera cabecilla de la trama—, declaró que “le pagaba por transferencia a mercantiles de Pachi Lucas”. Era una “cantidad periódica” que se priorizaba por órdenes de su jefe, añadió.
Según las investigaciones, Lucas era un nexo fundamental con las Administraciones gobernadas por el PP de las que los empresarios imputados obtenían concesiones millonarias para sus sociedades mercantiles u organizaciones declaradas falsamente sin ánimo de lucro. Actuaba, señala la policía, “de intermediario para la gestión, entre otras, de reuniones con personas relevantes del PP”.
En las postrimerías del Gobierno de Zapatero, el 4 de julio de 2011, Pachi Lucas envía un SMS a Crespo para comunicarle la cita que le había conseguido con la que luego sería ministra de Fomento, Ana Pastor: “Gerardo, el jueves 7. A las 5,30 en Génova, despacho Ana Pastor. Marga [una directiva de las empresas de Crespo] y tú. Un saludo. Feijóo va a ser clave”.
Unos días después una representante de Azetanet, una de las empresas de Crespo, informa a Pachi Lucas de que la firma se va a presentar a un concurso de la Diputación Provincial de Pontevedra para actividades de formación. “Te lo comento por si está en tu mano hacer algo”, le dice al amigo de Feijóo, aunque finalmente la sociedad del imputado no logró el contrato. Un mes después de estas gestiones, el empresario madrileño compartió tendido en la plaza de toros de Pontevedra con Feijóo, Mariano Rajoy, Alfonso Rueda y Rafael Louzán.
La policía graba en enero de 2012 una conversación entre Crespo y Lucas en la que queda “patente” que el primero “está intentando influir en una persona sin identificar, supuestamente para conseguir el pago de alguna cantidad adeudada”. “Necesito verte”, le dice Crespo. “Hoy llamé a Génova y pedí una cita”. Una colaboradora del empresario coruñés afirma que Lucas está “muy pendiente de Galicia” pero que ha hablado con él para que no se olvide “de lo de Madrid”.
Pachi Lucas y Feijóo se conocieron en Madrid en los noventa cuando el dirigente popular ocupaba cargos en los Gobiernos de José María Aznar. Lucas se dedicaba al sector de la joyería. Según consta en el Registro Mercantil, actualmente sigue administrando Lucas y Cia Joyeros, así como las firmas Disart 4 y Ralumeg, dedicadas a la orfebrería y a los regalos de empresa.
Tal era la importancia que le otorgaba a Lucas el trío formado por Crespo, Pérez Bello y el hostelero Eliseo Calviño, principales imputados, que cuando el madrileño, en la primavera de 2012, dejó repentinamente de cogerles el teléfono, en los despachos de los gallegos saltaron las alarmas. El esquinazo coincidió con el momento en el que la Consellería de Benestar empezó a realizar inspecciones en las entidades de la trama, subrayan los encargados de la investigación judicial. El 1 de junio de 2012, Crespo escribe un mensaje desesperado a Carlos Negreira, alcalde de A Coruña con el que mantiene una relación que los agentes tachan “de confianza”. “Carlos se está cometiendo una injusticia con mi empresa y me va a llevar a la suspensión de pagos”, le dice Crespo. “Ninguno me cogéis el teléfono, incluido Pachi, que le aconsejáis que me deje”.
Las organizaciones de Crespo, Calviño y Pérez Bello nunca antes habían sido objeto de controles por parte del Gobierno gallego, confesaron los imputados en sus conversaciones telefónicas grabadas aquellos días por la policía. Aunque ellos lo ignoraban, el cambio de actitud de la Xunta y del PP tenía una causa. Meses antes, a mediados del mes de diciembre de 2011, el testimonio de dos extrabajadoras de las entidades con las que captaban fondos públicos había puesto en marcha una investigación judicial en el Juzgado de Instrucción número 7 de A Coruña. “Carlos [por Carlos Negreira] y estos lo saben hace tres meses”, le confesó, indignado, Crespo en junio de 2012 al dirigente de una asociación vecinal del centro urbano de A Coruña, también vinculada al PP, en referencia a las inspecciones de la Xunta a sus empresas. “Sí, desde que le dijeron a Pachi 'no te pongas al móvil”.
Aquella carta a Feijóo en la que uno de los implicados en el caso presumía de la genética popular de la Federación de Autónomos de Galicia, una misiva calificada entre los imputados como “urgente, personal y confidencial”, es una de las varias comunicaciones de estos con el presidente de la Xunta recogidas en el sumario del caso. En la misiva, Pérez Bello trasladaba además al líder del PP gallego su temor a que el Gobierno central, entonces en manos del PSOE, les retirase las millonarias ayudas que recibían y se las otorgase a otras entidades que “pedirán el voto para el partido socialista”. “Ellos tendrán el dinero y nosotros no; así de claro”, advertía Pérez Bello al presidente del Gobierno gallego. La policía halló en la contabilidad de la trama pagos al PP en 2011 por 17.000 euros, 15.000 de ellos en las vísperas de las elecciones generales que ganó Mariano Rajoy.
En el sumario constan dos correos electrónicos de Crespo a Feijóo en los que le traslada, en palabras de la policía, “sus inquietudes laborales”. Uno de ellos lo envió el imputado con copia oculta a Pachi Lucas. El 22 de mayo de 2011, en la jornada electoral en la que el PP arrebató el poder al PSOE en A Coruña, Santiago y Ferrol, cuando el partido saboreaba ya la victoria, Lucas remite un SMS a Crespo: “Comiendo en Beluso, presidente, mar...! Todo bien”.

Máis:
http://praza.gal/politica/8122/a-trama-zeta-anotou-agasallos-para-feijoo-e-altos-cargos-da-xunta/
http://praza.gal/politica/8134/mato-negase-a-dimitir-e-rifalle-a-oposicion-por-pedirlle-contas-da
http://praza.gal/politica/8124/a-policia-achaca-as-falsidades-da-trama-zeta-ao-nulo-control-da-administracion/

De los papeles de Bárcenas a los falsos cursos de formación

http://elpais.com/
Varios casos judiciales arrojan sombras de financiación ilegal sobre el PP gallego

Feijóo, Louzán y Pachi Lucas, supuesto conseguidor de la trama de Crespo, en los toros en Pontevedra en 2011 / ÓSCAR CORRAL
En los dos últimos años, varias investigaciones judiciales han sembrado sospechas sobre la financiación del PP gallego. En todos los episodios, la dirección de los populares ha evitado ofrecer explicaciones públicas. Estos son los casos que han levantado las sospechas.
 Los papeles de Bárcenas. El extesorero nacional del PP declaró en 2013 ante el juez Pablo Ruz que en 2006, cuando Feijóo ya era el líder en Galicia, el entonces gerente regional del partido, Modesto Rodríguez, le envió un escrito en el que detallaba ingresos en b por valor de 1,8 millones de euros. El dinero procedía supuestamente de donaciones de empresas que habían recibido contratos de los gobiernos de Fraga, entre ellas las millonarias adjudicaciones de la Cidade da Cultura. El PP impidió que Feijóo explicase el asunto en el Parlamento.
Embargo en Pontevedra. El PP nacional asumió en 2009 el pago de 187.000 euros por un embargo en la sede de Pontevedra. La dirección exigió que Galicia devolviese esa cantidad y, según Bárcenas, el gerente de los populares gallegos viajó a Madrid para entregarle en mano 50.000 euros. En un informe del pasado agosto, la policía certifica que ese dinero no se incluyó en la contabilidad oficial Feijóo volvió a alegar que no sabe nada del asunto.
 ‘Caso Pokémon’. Aduanas acusa a PP, PSdeG y BNG de recibir dinero en negro del grupo empresarial Vendex, con numerosas contratas municipales en Galicia. Por ese motivo está imputado el alcalde popular de Ferrol, José Manuel Rey Varela, y el Supremo estudia si imputa también al presidente del partido en Lugo, José Manuel Barreiro. Ambos están acusados de recibir sobornos de unos 5.000 euros en cada caso.
Cursos de empleo. En la contabilidad de las empresas de Gerardo Crespo, presunto cabecilla de la trama, aparecen registrados dos donativos opacos al PP en 2011 por valor de 17.000 euros. El propio Crespo no lo ha negado y ha anunciado que lo explicará ante la juez del caso.